Desde hace años podemos ver cómo en las películas y series la gente se acerca a los parques donde decenas de camiones se reúnen a ofrecer una amplísima gama de comida con menús que sorprenden con su creatividad y buen sabor.
Esa cultura del Food Truck ha migrado a Latinoamérica y Costa Rica no ha sido la excepción. Aunque para ser francos en nuestro país este asunto del verdadero camión de comida aún está muy rezagado.
La idea de estacionarse en espacios públicos a la espera de clientes hambrientos no es tan fácil, ya que este modelo de negocio no cuenta con los permisos necesarios para funcionar por lo que muchos de los inversores han tenido que modificar su proyecto a eventos privados, como el caso de Lucho Food Truck by chef Rafael.
A inicios del 2016 la fiebre de los camiones de comida comenzó a contagiar a los ticos. Fue tal el movimiento que ya para abril de ese año surgió la Asociación Costarricense de Food Trucks, hoy reúne a 12 propietarios de camiones.
Jorge López, presidente de la Asociación asegura que si bien la falta de apertura en permisos impide vivir el verdadero espíritu del Food Truck sí existe apoyo de algunas municipalidades como la de Curridabat que permite a estos camiones estacionarse en sus parques.
"Actualmente estamos tramitando permisos especiales para utilizar espacios públicos donde más gente pueda tener acceso al camión, intentando replicar un poco el "Food Truck" que se está dando en otros países".
Añade: "Tenemos algunos vacíos legales en el país que nos complica un poco las cosas pero si tengo que reconocer que tenemos una muy buena disposición por parte de las autoridades, poco a poco vamos avanzando y encontrando la manera de hacerlo legalmente".
Por ahora el gremio trabaja unido y ofrece -dentro de lo legal- servicios que vale la pena probar. En Perfil nos fuimos a recorrer las calles y les traemos algunas de las recetas que probamos en cinco camiones, para que se haga una idea del menú que ofrecen estas cocinas rodantes.
Para conocer más sobre cada uno de ellos, de click en los enlaces:
1. Agüizotes, el food truck que nació en Escalante: una extensión del restaurante Casa Agüizotes gastropub ubicado en barrio Escalante.
2. Deli Truck, la casa ambulante de las mejores salsas: Su menú está basado en emparedados, hamburguesas y dedos de pollo, aunque sin duda alguna la estrella de cualquier platillo son las salsas.
3. Ventanita Meraki: comida con espíritu urbano: Propuesta creada por el chef Paulo Valerios evolucionó al Food Truck desde hace ya siete meses.
4. Bombona, la alternativa dulce de los Food Trucks: una versión de vocha remodelada y adaptada para dar espacio a la magia de las crepas.
5. Lucho, el food truck con identidad propia: experto en ofrecer parrilladas, pero también es flexible, ya que trabaja únicamente para eventos privados.
Fotos Adrián Soto y Luis Navarro.